PSICOTEENS
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LPSI. ESP. Nilse Ximena Vargas Pérez
Psicoterapeuta de adolescentes
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La adolescencia es una transición en el ciclo de vida, que marca la transformación de la infancia hacia el mundo de las responsabilidades y derechos adultos. La adolescencia es un gran desafío individual, familiar y social.
Los adolescentes deben disfrutar los cambios que esta etapa implica: biológicos,cognitivos, cambios que provienen de la toma de decisiones que comienza a ser suya y no siempre de los mayores, cambios en la expectativas que se abren sobre ellos. Etapa en la que descubren la sexualidad, la amistad, la exploración de nuevas capacidades, el descubrimiento de nuevos espacios de ocio y de conocimiento. Al igual que gran parte de las transiciones y transformaciones vitales, tiene elementos de desconcierto y dificultad, exige adaptación y aprendizaje.
Adolescentes y familia en conflicto
Pero también la adolescencia es un desafío familiar, de hecho, podríamos llamar "Familia adolescente" a la familia que tiene un adolescente, porque los cambios que experimenta son cambios en todo el sistema familiar. La familia se transforma en su conjunto: normas, rutinas de convivencia, roles de autoridad y decisión, distancia emocional y de afecto físico, distribución de tiempo y espacio en el hogar; también hay una exigencia de cambio psicológico, las relaciones familiares cambian y la definición de los padres de sí mismos como padres y como pareja se ve desafiada por la realidad de las nuevas relaciones que se producen ante la transformación de un hijo en su adolescencia.
Los padres de hijos adolescentes oscilan entre los 36 y 58 años de edad, pocas veces se pone atención a esta combinación de edades entre los padres e hijos. Es un "cruce" de edades singular. Los hijos se encuentran en plena expansión de sus expectativas, los padres se encuentran en una etapa de estancamiento o decremento. Parece una mala combinación de edades lo que complica las cosas cuando surgen dificultades en la transición de la etapa adolescente. A veces la ineficacia en afrontar algunas crisis naturales y esperables se reitera y cronifica.
Hay "problemas de la vida" y "problemas que no nos dejan vivir" y en la adolescencia el primer tipo de problemas se convierte en uno que paraliza la vida de la familia y el desarrollo afectivo, psicológico y social de los jóvenes pues los padres quieren optar por otras estrategias y actitudes que buscan "regular" a los hijos. La intervención terapéutica ayuda a todo el sistema familiar a hacer los ajustes adecuados, reparar problemas que se han estancado y que han bloqueado el desarrollo y bienestar de todo el sistema familiar. Cuando la terapia tiene éxito ha resuelto "un problema que no nos deja vivir", preparamos a la familia para que afronte con buen animo y creatividad los "problemas de la vida" que sin duda toda familia tiene en el proceso vital.
Basada en el libro : "Manual de terapia sistémica breve" (F.García, M. Ceberio) 2016